Barcelona se tiñe de estrellas bajo el glamuroso, y polémico, desfile de moda de Louis Vuitton. La marca de lujo francesa llena esta noche el Park Güell con el desfile ‘Crucero 2025’, en el marco de la edición 37 de la Copa América, que se celebra este verano en la costa catalana y donde la firma de París es ‘title sponsor‘. Un desfile donde la arquitectura de Gaudí se entremezclará con personalidades como la actriz Ana de Armas, Zendaya, Cate Blanchett, el cantante de K-Pop Felix Lee o Jaden Smith.
El evento ha empezado al anochecer, en un espacio emblemático que ha centrado las miradas del público de la marca y seguidores de las estrellas. Algunos de los invitados al desfile se han hecho ver en el Hotel Mandarín Oriental, horas antes del inicio del acto de Louis Vuitton en el Park Güell.
Un desfile que ha levantado polémica
El anuncio de que la firma francesa iba a celebrar un desfile en el Park Güell levantó la crítica de parte de la ciudadanía. Coincidiendo con el evento, cientos de manifestantes se han concentrado en Barcelona para protestar por la presencia de la marca en la ciudad. Los activistas han cortado Travessera de Dalt ante la mirada de la Brimo, que ha cargado contra los civiles y ha detenido a una persona. Los agentes de los Mossos d’Esquadra han impedido a los manifestantes que se acercaran al parque.
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La protesta ha sido convocada por entidades vecinales con el apoyo de otras organizaciones y colectivos como entidades animalistas. El lema de la manifestación era ‘Los barrios no somos una pasarela para su desfile’, si bien durante la concentración también se han escuchado consignas como, por ejemplo, ‘Barcelona no está en venta’ o ‘Louis Vuitton tortura y asesina’.
Las protestas en contra del desfile de Louis Vuitton se han sucedido a lo largo de la semana. Vecinos y familias de alumnos de las escuelas Baldiri Reixac, Turó del Cargol y Reina Elisenda se concentraron el miércoles ante las puertas del parque para expresar su rechazo al evento por considerar que privatiza un espacio público. «El Park Güell será siempre nuestro» o «Fuera Louis Vuitton» son algunos de los cánticos que se escucharon durante la manifestación.
Impacto del Desfile de Louis Vuitton en Barcelona
El desfile de Louis Vuitton en el Park Güell ha generado un cruce importante de opiniones, evidenciando las tensiones entre la cultura del lujo y el deseo de los ciudadanos de mantener la integridad de sus espacios públicos. A través de la protesta, los ciudadanos han manifestado su preocupación por la mercantilización del patrimonio cultural y la falta de consideración hacia la comunidad local. Esta dinámica muestra un enredo complejo entre el turismo de lujo, la comunidad local y la conservación de la identidad cultural de Barcelona.
Preguntas Frecuentes sobre el Desfile de Louis Vuitton en Barcelona
¿Por qué el desfile de Louis Vuitton en el Park Güell ha sido tan polémico?
La controversia surge de la percepción de que el evento privatiza un espacio público, generando rechazo entre vecinos y activistas que buscan proteger su patrimonio cultural.
¿Cómo han reaccionado los ciudadanos ante el desfile?
Cientos de manifestantes se han concentrado en diversas ocasiones, expresando su descontento a través de protestas y consignas que critican la presencia de la marca en la ciudad.
¿Qué figuras del espectáculo estuvieron presentes en el desfile?
El desfile contó con la participación de personalidades como Ana de Armas, Zendaya, Cate Blanchett, entre otros, lo que añadió un toque de glamour al evento.
Reflexiones sobre el Cruce entre Moda y Espacio Público
La intersección entre los desfiles de alta costura y espacios emblemáticos como el Park Güell invita a una reflexión crítica sobre cómo el arte, la cultura y el comercio pueden coexistir. Mientras que eventos como este celebran el talento creativo, también plantean cuestiones sobre quién tiene el derecho a disfrutar de estos espacios y bajo qué condiciones. La tensión presentada en este desfile resalta la necesidad de un diálogo continuo entre los intereses comerciales y la preservación del carácter comunitario de lugares tan significativos como el Park Güell.
